POR mucho tiempo la gente se ha preguntado el significado de la vida en la Tierra. Han mirado al enorme cielo estrellado. Han admirado una puesta de Sol de hermosos colores y la belleza de la campiña. Personas pensadoras han razonado que todo ello tiene que tener algún magnÃfico propósito. Pero con frecuencia se han preguntado dónde encajan ellas en ese cuadro.—Salmo 8:3, 4.
En alguna ocasión en la vida la mayorÃa de la gente se pregunta: ¿Se supone que solo vivamos por corto tiempo, saquemos lo que podamos de la vida, y entonces muramos? ¿Adónde vamos, en realidad? ¿Podemos acaso esperar más que solamente el ciclo breve de nacer, vivir y morir? (Job 14:1, 2)
POR QUÃ PUSO DIOS AL HOMBRE EN LA TIERRA
No era el propósito de Dios el que Adán y Eva murieran después de algún tiempo y pasaran a vivir en otro lugar. Se suponÃa que se quedaran aquà para atender la Tierra y todas sus cosas animadas. Como dice la Biblia: “Los bendijo Dios y les dijo Dios: ‘Sean fructÃferos y háganse muchos y llenen la tierra y sojúzguenla, y tengan en sujeción los peces del mar y las criaturas volátiles de los cielos y toda criatura viviente que se mueve sobre la tierra.’” (Génesis 1:28; 2:15) Tanto Adán y Eva como todos los hijos que ellos tendrÃan pudieran haber sido felices en la Tierra para siempre y hacer las cosas que Dios deseara que hicieran.
Note que “los bendijo Dios.” El realmente se interesaba en sus hijos terrestres. De modo que como Padre amoroso les dio instrucciones que eran para el bien de ellos. Ellos habrÃan hallado felicidad al obedecerlas. Jesús sabÃa esto, y por eso dijo posteriormente: “¡Felices son los que oyen la palabra de Dios y la guardan!” (Lucas 11:28) Jesús guardó la palabra de Dios. “Siempre hago las cosas que le agradan,” dijo. (Juan 8:29) Esta es la clave a la mismÃsima razón de nuestra existencia. Es que tengamos vidas felices, colmadas de gran variedad de experiencias, mediante vivir en armonÃa con la voluntad de Dios. El servir a Jehová es algo que dará verdadero significado a nuestra vida ahora. Y al hacer eso estaremos encaminándonos a vivir para siempre en el ParaÃso en la Tierra.—Salmo 37:11, 29.
POR QUÃ ENVEJECEMOS Y MORIMOS
Pero ahora todos envejecemos y morimos. ¿Por qué? Como se indicó en el capÃtulo anterior, esto se debe a la rebelión de Adán y Eva. Jehová les habÃa impuesto una prueba que manifestaba que era necesario que ellos fueran obedientes a Dios. Dijo él a Adán: “De todo árbol del jardÃn puedes comer hasta quedar satisfecho. Pero en cuanto al árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo no debes comer de él, porque en el dÃa que comas de él positivamente morirás.” (Génesis 2:16, 17) Al comer de aquel árbol, Adán y Eva volvieron la espalda a su Padre celestial y rechazaron su guÃa. Desobedecieron y tomaron lo que no les pertenecÃa. Pudieran haber vivido felices en un paraÃso para siempre, sin pobreza ni sufrimientos, pero ahora echaron sobre sà la pena que se paga por el pecado. Esta pena es la imperfección y la muerte.—Romanos 6:23.
¿Sabe usted cómo nos vino de Adán el pecado? Después que Adán cayó en imperfección, pasó a todos sus hijos aquella imperfección y la muerte. (Job 14:4; Romanos 5:12) Le ayudará a entender esta situación el pensar en lo que sucede cuando un panadero hace un pan en una vasija que tiene una mella. En todo pan que se haga en esa vasija habrá una marca. Adán llegó a ser como aquella vasija, y nosotros somos como el pan. El cayó en la imperfección cuando quebrantó la ley de Dios. Fue como si hubiera recibido una mella o una marca mala. Por eso, cuando él tuvo hijos, todos ellos recibieron esta misma marca del pecado o imperfección. Ahora enfermamos y envejecemos debido al pecado que todos hemos recibido de Adán.
Bajo la gobernación del reino de Dios, Cristo podrá perdonar los pecados de todas las personas que aman a Dios y le sirven. Esto significa que todos los dolores y sufrimientos y enfermedades serán quitados. ¡Nadie jamás tendrá que envejecer y morir! ¡Qué maravillosa esperanza es ésta para el porvenir! SÃ, verdaderamente podemos esperar mucho más que solo nacer, vivir por poco tiempo y entonces morir.
Mediante el adquirir conocimiento de la Biblia, podemos encontrar verdadero significado de la vida, pues gira entorno a lo que Jehová Dios nos pide y llegamos a saber que es una vida llena de satisfaccion, aun viviendo en un mundo lleno de tantos problemas, pero la Biblia nos garantiza que esto es pasajero.
Ahora, ¿desea gozar de plena satisfaccion en la vida ahora?. Al continuar aprendiendo acerca de Dios, y al servirle, realmente podemos vivir para siempre en el ParaÃso en la Tierra.